La cadena logística, un engranaje vital en la economía mundial, enfrenta un desafío persistente: la inseguridad. El transporte terrestre presenta una amenaza que se extiende a lo largo de toda la cadena de suministro, generando repercusiones significativas en la economía global.
Logística terrestre: Impactos del Paro Nacional de Transportistas
El transporte terrestre, siendo uno de los pilares fundamentales de la cadena logística, está expuesto a diversos riesgos como robos, sabotajes, y piratería en carreteras, lo que resulta en pérdidas tanto económicas como de tiempo. Los camiones y trenes son blancos frecuentes de robos de carga, lo que impacta negativamente en la eficiencia y confiabilidad del suministro.
Debido a dichos sucesos, el pasado 15 de Febrero, decenas de transportistas han tomado las principales carreteras que movilizan a todo el país, esto para exigir un alto a la inseguridad que presentan día con día así como a las extorsiones a las que son propensos. Las afectaciones del paro nacional de transportistas se concentraron en las vías de acceso a Ciudad de México y se focalizaron en el Arco Norte, la autopista México – Cuernavaca registró un cierre en ambas direcciones que inmovilizó el tráfico durante varias horas, informó en su momento Caminos y Puentes Federales (Capufe).
La Guardia Nacional consignó que las concentraciones también afectaron otras zonas del país, como Puebla, Veracruz, Hidalgo, Sonora, Chihuahua, Tamaulipas, Jalisco, Oaxaca, Chiapas, Nuevo León, Tabasco, Sinaloa, el Estado de México, entre otros.
Dicho paro nacional de transportistas creó una disrupción masiva en la cadena de suministro. Al existir un paro en las principales vialidades que conectan al país, aumenta el costo de los productos, la canasta básica y materias primas, dando como resultado la inflación en precios. Esto en materia económica, ha perjudicado tanto a los consumidores como a los agricultores, ya que los productos más comerciales se encuentran desabastecidos y con precios altos logrando como consecuencia que el país tenga pérdidas millonarias.
Como consecuencia alterna, en materia de transporte, al tomar rutas alternas se elevan los tarifarios de fletes terrestres que transportan dicha mercancía, así como aumenta el tiempo de tránsito y el desgaste del conductor a la par que la unidad, logrando que las empresas dedicadas al transporte presenten dificultades en cuanto a rutas, combustible y operadores logísticos.
De acuerdo con cifras de la AMIS y la Canacar, sólo el año pasado se estimaron robos de entre 9 mil y 13 mil unidades, aproximadamente.
Por otro lado, ante la coyuntura económica del nearshoring, el sector enfrenta otro grave problema que es la falta de operadores, pues se sabe que existe un déficit de casi el 45 por ciento de choferes, lo que podría perjudicar al país si las inversiones proyectadas para éste año por este fenómenos no se concretarán ante la falta de seguridad.
De acuerdo con el reporte de Escasez de Operadores 2023 de la International Road Transportation Union (IRU), el déficit de operadores en México alcanzó las 56,000 vacantes el año pasado.
La cifra señalada por la IRU corresponde al 9% del total de las plazas para conductores en el país, y forma parte de los 3 millones de vacantes que se registraron en 2023 a nivel mundial.
De igual manera, Carlos García, vicepresidente de la Amotac, mencionó que la exigencia es que se actúe rápido, se incremente la seguridad y presencia de la Guardia Nacional en las rutas de transporte, así como que se garantice la seguridad de los operadores de transporte, quienes han perdido la vida o han tenido que migrar a Estados Unidos por estos problemas. Agregó también, que aunque la inseguridad para los transportistas se ha expandido por todo el país, los estados más peligrosos para circular son San Luis Potosí, Zacatecas, Veracruz, Puebla, Tlaxcala, Querétaro, la zona nororiente del Edomex y Chiapas y destacó que por lo menos en lo que va del año, se han registrado hasta 30 camiones robados a miembros de la Amotac.